24.2.09

Las crticas constructivas hay que recibirlas con los brazos abiertos y con la suficiente madurez para analizarlas y sacar provecho de ellas, igualmente tenemos que tener el criterio para saber cuando la misma es valida o más bien qué de bueno podemos sacar de ellas y cuáles otras cosas desechar.
Al entrar en la tercera edad los seres humanos tendemos a querer compartir con los demás enseñanzas y vivencias que los años nos han dado, lo cual es algo que me parece muy bueno. Compartir el conocimiento nos hace inmortales, ahora bien, como humanos al fin, a veces podemos equivocarnos y externar comentarios y consejos fruto de nuestras percepciones sin que las mismas sean validas.
Todos tenemos particularidades que nos distinguen de los demás tanto fisicamente como nuestra personalidad, esperar que todos nos comportemos de la misma forma es una utopía. Hoy un importante ejecutivo de la empresa donde presto mis servicios me juzgo por haber saludado a las tres personas que estaban presentes en el ascensor y no haber tenido una atención especial con dicha persona, todo esto transcurrió en un periodo de 15 segundos.
Soy amable y cortes ahora no soy hipocrita, creo en la espontaneidad. Si estoy afectada por una situación particular (en este caso tenia una gastritis horrible), es probable que no te salude con la misma energía que usualmente lo hago, pero como la persona educada y profesional que soy te saludaré.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy cierto, la experiencia ayuda, construye, nos aporta, pero algunas son experiencias que se contaminan de las percepciones personales, subjetivas y que no necesariamente son las ideales, las esperadas.

Y hay gente que necesita que le sea alimentada sus necesidades (carencias)personales, que es bueno y a veces no tan bueno...el ejecutivo de tu empresa...probablemente tenga una carencia en su yo, una necesidad de ser reconocido...quizás si...quizás no

Un abrazo